El rayo que no cesa

En el año de celebración del vigésimo aniversario de Amores Grup de percussió, nos encontramos a las puertas de otro aniversario de Miguel Hernández.

Desde la obra el Rayo que no cesa, Miguel Hernández tiene un breve transcurso creador pero que da como resultado una obra muy intensa. El título hace referencia a la obra de título homónimo de Hernández. Me interesaba el tratamiento que hace en su discurso  poético y, la sutileza sonora con la que trabaja la palabra (la luz, la sombra, la memoria…) para su posible interrelación en la organización de mi discurso sonoro.

El discurso sonoro de la obra tiene ciertos paralelismos con los tratamientos habituales en los artificios retóricos de Hernández (Anáfora, Epanadiplosis).

Una escritura neutra del metro (metro por la expresión, como en la tradición oral o la notación neumática) y la abstracción del tiempo a través de tratamientos acústico temporales. Estadios diferenciados de desarrollo tímbrico con un común denominador, la resonancia y un material contrastante (Stridulo – Fruscio).  La acción de producción del sonido es un reflejo del gesto sonoro que elabora la trama musical.